Erase una encantadora tarde de mayo,
cuando los días nos regalan más tiempo,
y el tiempo nos regala la compañía ideal para pasar el día.
Desde el mirador da Garita da Herbeira,
donde se encuentran los acantilados más altos de Europa
y raro es el día que allí el viento no sopla.
Finalizando el mes de Mayo de 2014.